VIERNES 17 DE DICIEMBRE
Muy temprano para su gusto, su celular comenzó a reproducir una alegre y ruidosa canción, pensando que era la alarme despertador la ignoró, pero al notar que la música seguía sonando, tomó con algo de molestia su teléfono y notó que lo estaban llamando.
-Hola – contestó Tae Hwan aun con voz adormilada.
-Young Mi tuvo un accidente, está en el hospital general de Seúl – dijo la voz de una mujer por el otro lado de la línea.
-¡¿Qué?! – Dijo levantándose de un salto de su cama esta vez completamente despierto mientras rápidamente sacaba ropa de su armario - ¿Sabes en que habitación esta? Iré a verla –
Salió de su habitación y encontró a su padre apenas abriendo la puerta para salir a trabajar y corrió siguiéndolo para subirse en el coche con él y decirle – Llévame al hospital general de Seúl luego te explico todo. –
Al llegar al hospital fue de la manera más rápida que pudo hasta el cuarto donde se encontraba Young Mi. Estaba por entrar al pasillo donde el cuarto se encontraba cuando el doctor Han lo vio corriendo y lo detuvo
-¡Hey! ¿A dónde vas? ¡No puedes correr aquí! –
-Tengo que ver de inmediato a Kim Young Mi –
-¿Qué eres de ella? No te puedo dejar pasar así sin más –
-Soy su novio –
-… Pasa… pero no hagas nada estúpido – y dicho esto el doctor Han dejó al muchacho continuar su camino.
Cuando por fin divisó el cuarto 403 se acercó caminando mas lento que antes hasta llegar a ver por la ventana de la habitación. A través de ella pudo ver como la persona que mas amaba se encontraba sentada en su cama platicando con un chico pelinegro al cual no le podía ver la cara pues le daba la espalda a él, pero no a Young Mi. Se acercó un poco más y tomó la perilla de la puerta en una de sus manos y la giró para poder entrar.
-¡Yah! ¡Eso no puede ser! – Escuchó Tae Hwan decir a Young Mi la cual reía y seguía hablando con el pelinegro sin reparar en su presencia.
-Es verdad, no lo recuerdas ahora, pero yo si – dijo Jae Won
-¿Cómo se que no me estas mintiendo? – Preguntó Young Mi con una sonrisa divertida en su rostro; Jae Won en las pocas horas que llevaba de estar con Young Mi logró ganarse su confianza, aunque ella no lo recordara, la amistad que tenía con él estaba intacta, por lo que no les fue difícil entablar una conversación.
-¿Crees que miento? – Preguntó esta vez Jae Won tomando con sus dos manos el rostro de Young Mi para que esta lo mirara a los ojos y viera la verdad en ellos. La distancia entre los rostros de ambos era muy poca y esto lo pudo notar bien Young Mi por lo cual un ligero sonrojo apareció en sus mejillas.
Tae Hwan que había estado observando esa escena, fue invadido por los celos y decidió hablar para evitar que “algo más” pasara entre los dos chicos. Carraspeó un poco con su garganta llamando la atención de los dos presentes. Ambos muchachos voltearon y Jae Won al ver a Tae Hwan soltó a Young Mi y se puso de pie.
-¿Quién eres tu? – pregunta Young Mi
-Soy Kang Tae Hwan, tu novio –
-¿eh? ¿Te… tengo novio?- dijo sorprendida Young Mi.
-¿No me recuerdas? – pregunta un confundido Tae Hwan
-Perdió la memoria por el golpe… aun no sabemos si es pérdida temporal o permanente – dijo Jae Won entrando de nuevo en la conversación
-Bueno… en ese caso te haré mas fácil el recordarme – dijo Tae Hwan mirando a Young Mi mientras se iba acercando a ella dispuesto a besarla. Jae Won estaba que le hervía la sangre de los celos, pero si eran novios no podía hacer nada. Cuando el rostro de Tae Hwan se encontraba pocos centímetros del de Young Mi ella puso su mano en el pecho de Tae Hwan apartándolo.
-Entiendo que seamos novios, pero yo no te recuerdo… así que… - comenzó a hablar Young Mi siendo interrumpida por un sorprendido Tae Hwan
-¿Me estas diciendo que terminamos? –
-Algo así – respondió fijando sus ojos verdes en los negros de el. Jae Won quien les había dado la espalda para no meterse en aquella discusión esbozó una pequeña sonrisa al saberse con permiso para conquistar a la chica ojijade.
-Entonces te conquistaré de nuevo – dijo Tae Hwan manteniendo las esperanzas
-Mmm… está bien… como quieras –
-Mejora pronto Young Mi-ah… oppa volverá después – dijo Tae Hwan mientras se dirigía a la puerta del cuarto y la abría.
-No eres mi oppa… ya no somos novios –
-Fine, fine… - dijo Tae Hwan levantando las manos antes de salir de la habitación. Jae Won se volteó a ver a Young Mi de nuevo poniendo candado a la puerta sin que ella se diera cuenta, no quería que los molestaran de nuevo.
-Jae Won-ah – dijo Young Mi llamando de inmediato la atención del mencionado
-¿si? –
-¿Sabes que estaba haciendo en la calle cuando me atropellaron? – El pelinegro se sentó de nuevo junto a Young Mi y contestó a su pregunta
-Comprabas unas cosas para la fiesta que íbamos a hacer –
-¿Fiesta? ¿De que? –
-De cumpleaños – le respondió con una sonrisa
-¿Quién cumple años?... ¿tú? –
-Hoy… si –
-oh… no te tengo un regalo – dijo preocupada
- Si lo tienes… no lo recuerdas, pero lo tienes. Debe estar en tu casa – La chica se quedó pensativa, pero por mas que lo intentó no pudo recordar nada, así que decidió dejarlo como estaba, no era bueno forzar la mente en este tipo de cosas.
-Cuéntame más cosas – dijo Young Mi con toda la curiosidad en su mirada, y Jae Won no podía decir que no a eso, así que comenzó a hablar.
~o~o~o~o AKTF ~o~o~o~o
Young Mi fue dada de alta dos días después de haber estado internada debido a que no encontraron nada fuera de lo normal, además de la pérdida de memoria. Cuando llegó a su casa se encontró con Jae Won ahí adentro con una pequeña caja azul adornada por un listón rojo. La chica se sorprendió de verlo ahí, pero a la vez se sintió feliz. No sabía exactamente que era lo que sentía por el chico de bonitos ojos marrones, pero estaba segura de que era algo muy profundo y fuerte para hacer que su corazón se acelerara cada que lo veía y que sus mejillas se encendieran de color rojo.
-Feliz cumpleaños… amm, algo retrasado – le dijo Jae Won con una sonrisa y le entregó la caja con ambas manos. Young Mi la tomó sin dudar y cuando sus dedos se rozaron ligeramente al traspasar de dueño el regalo, en la mente de la chica de ojos verdes apareció un pequeño recuerdo.
Flash Back
-¿Qué quieres que te regale en tu cumpleaños? – pregunta Young Mi a Jae Won mientras jugaban videojuegos en lo que parecía ser una habitación de hombre, la cual la chica pelinegra supuso que era el cuarto de su primo y mejor amigo.
-Lo que me quieras dar está bien Mi-ah – le respondió revolviéndole el cabello a la chica, sabiendo que ella se enojaría porque odiaba que la despeinaran.
-¡Yah!, ¡No toques mi cabello! –
-Entonces déjame jugar con tu cabello en mi cumpleaños, que ese sea mi regalo –
Fin del Flash Back
-¿Young Mi?, ¿Estas ahí? – pregunta el pelinegro pasando una mano enfrente del rostro de su amiga para que saliera de sus pensamientos
-¿Eh?, ah, si –
-Te fuiste por un momento… ¿vamos al patio? – y la chica solamente asintió en respuesta aun con la caja de su regalo en las manos. Ambos muchachos fueron al patio trasero de la casa de los Kim y se sentaron en los columpios que tenían desde hace mucho tiempo, cuando Young Mi era una niña. Muy apenas cabían en ellos, pero siempre les había gustado sentarse a platicar ahí. El clima de ese día era agradable para pasarla afuera, a pesar de ser Diciembre.
Young Mi abrió su regalo, encontrándose con un disco de música que inmediatamente reconoció
-¡Es un disco de mi grupo favorito! –
-¿Los recuerdas? –
-Como olvidarlos, son el mejor grupo de toda Asia, y este disco es muy difícil de conseguir porque solo salió en Japón – dijo emocionada Young Mi y Jae Won supo que la pérdida de memoria era temporal, o al menos parcial.
-Bueno, hace tiempo fui a Japón y lo compré para ti –
-Muchas gracias Jae-ah – y aquella manera de llamar su nombre hizo que el corazón del pelinegro se detuviera por un segundo. Porque él nunca le había dicho que ese era uno de los nombres con los que lo llamaba, e hizo sumamente feliz al chico que ella lo recordara.
-De nada – le respondió con una sonrisa que ella no vio por estar observando aun su regalo. Jae Won se puso de pie frente a Young Mi y extendió sus brazos. La chica al verlo, sin decir palabra alguna, simplemente con observar esos brazos extendidos y los ojos cerrados, con una ligera sonrisa en sus labios, la hizo sonreír también y entendiendo el mensaje perfectamente, se levantó a abrazarlo.
-¿Puedo jugar con tu cabello? – pregunta en un susurro Jae Won mientras sus dedos pasaban por el suave cabello de la chica.
-Claro, después de todo es tu regalo de cumpleaños – Y el corazón de Park Jae Won se detuvo una vez más.
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Fueron muchos meses sin actualizar esta historia y mi única excusa es que me sumerjo tanto en el YunJae que me olvido de todo lo demás. Pero aqui esta actualización por si alguien lee las historias de romance hetero que tengo y pues que sepa que no las abandono.